En la Atención Telefónica, el primer factor a considerar es que la persona que atiende el teléfono se convierte, en ese momento, en la imagen de la organización. Aunque se trate de una persona cuyo puesto de trabajo no esté creado, en principio, como de contacto con el cliente, cuando atiende a alguien por teléfono se convierte en lo que se denomina personal de línea.Durante el curso de un contacto telefónico sólo se está estableciendo la comunicación mediante un ÚNICO CANAL, el de la voz a través del teléfono. La comunicación se resiente y es más fácil que se distorsione. Los errores en la interpretación de los mensajes que, sucesivamente, emiten ambas personas, son más probables.Esta mayor probabilidad de distorsión de los mensajes recibidos, hace que la comunicación telefónica deba llevarse a cabo aplicando unas habilidades y técnicas específicas que, en la medida de lo posible, reduzcan los errores y malentendidos.Es de suma importancia que atendamos correctamente y lo que contamos ya que, aunque el tiempo de interacción sea breve, en esos momentos somos la “tarjeta de presentación” ante el cliente.